No derrames más lágrimas en tu ventana,
entre flores no escondas tu ojos brillantes,
no volverá a pasar la alegre mañana,
y ya no vuelvas a esperarle como antes.
Un hombre, poemas te recitaba,
a los pies de tu casa te soñaba,
Cuando tan guapa a recibirle salías,
asomada en tu ventana todo eran alegrías
Sécate tus lágrimas que volverán,
a pasar y verte más nuevos amores,
que sinceros y apuestos llegarán,
a que debajo de tu ventana, otra vez, te enamores.
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